La laparoscopia es una técnica quirúrgica mínimamente invasiva que utiliza un tubo delgado con cámara -llamado laparoscopio– para explorar y realizar procedimientos dentro del abdomen o la pelvis a través de pequeñas incisiones. Este enfoque, el cual reduce el trauma, acelera la recuperación y minimiza las cicatrices, ha revolucionado la práctica médica al proporcionar una alternativa menos intrusiva a las cirugías tradicionales. Para que conozcas en qué casos se utiliza, en Hospital Nacional te contamos más.
Laparoscopia: ¿cuándo se utiliza?
1. En la cirugía ginecológica
Este procedimiento se utiliza con frecuencia en procedimientos ginecológicos, como la extirpación de quistes ováricos, la ligadura de trompas, la histerectomía y la corrección de problemas relacionados con la fertilidad. Al realizar estas intervenciones de manera mínimamente invasiva, las pacientes experimentan menos dolor, una recuperación más rápida y una menor posibilidad de complicaciones en comparación con las cirugías tradicionales.
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2. En la cirugía urológica
En el campo de la urología, este procedimiento se emplea para procedimientos como la prostatectomía (extracción de la próstata), la nefrectomía parcial o total (extracción del riñón) y la corrección de anomalías en el tracto urinario. Los pacientes que se someten a cirugía laparoscópica urológica a menudo experimentan menos dolor postoperatorio y se benefician de una recuperación más rápida.
3. En la cirugía gastrointestinal
En el ámbito de la cirugía gastrointestinal, se utiliza para tratar diversas afecciones, como la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), la apendicitis, la obesidad mórbida a través de la cirugía bariátrica y la extirpación de tumores en el colon o el recto. La técnica ofrece una menor pérdida de sangre, cicatrices más pequeñas y una recuperación más rápida para los pacientes.
4. En la cirugía torácica
También se utiliza en cirugía torácica para abordar afecciones como el neumotórax, la extirpación de tumores pulmonares y la corrección de enfermedades esofágicas. Al evitar incisiones grandes en el pecho, los pacientes experimentan menos dolor, tienen una menor necesidad de analgésicos y se recuperan mucho mejor.
5. En la cirugía pediátrica
En los niños se utiliza para tratar afecciones como la apendicitis, hernias y malformaciones congénitas. Esta cirugía laparoscópica es especialmente beneficiosa en pacientes pediátricos, ya que les permite recuperarse más rápidamente y minimizar las molestias asociadas con las incisiones más grandes.
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Hospital Nacional: el lugar que necesitas
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Si tienes dudas o necesitas más información acerca de este procedimiento, no dudes en ponerte en contacto con nosotros a través de nuestros canales de atención. ¡Te estaremos esperando!