Imagina estar disfrutando de una deliciosa cena con amigos o familiares, pero de repente, sientes un ardor desagradable en tu estómago que interrumpe tu disfrute. ¿Te resulta familiar? Si es así, es posible que estés experimentando los síntomas de la gastritis. En este blog hablaremos de aspectos importantes para que puedas reconocer sus síntomas y tomes medidas para mejorar tu calidad de vida.
Síntomas de la gastritis
La gastritis es una condición gastrointestinal que puede manifestarse de diversas formas, siendo la indigestión, o dispepsia, uno de los síntomas más comunes. Reconocer estos signos tempranos es fundamental para buscar atención médica adecuada y abordar la condición de manera efectiva. Aquí te presentamos una lista ampliada de los síntomas que podrías experimentar:

- Dolor o molestia en la parte superior del abdomen: una sensación de ardor, dolor o malestar en la región superior del abdomen es un síntoma característico de la gastritis y la gastropatía. Este malestar puede variar en intensidad y duración.
- Náuseas o vómito: la presencia de náuseas o episodios de vómito, especialmente después de las comidas, puede indicar un trastorno gástrico como la gastritis.
- Sensación de llenura demasiado pronto durante una comida: si sientes que tu estómago se llena rápidamente después de empezar a comer, incluso con porciones pequeñas de alimentos, podría ser un signo de gastritis.
- Sensación de llenura después de una comida: experimentar una sensación de saciedad o plenitud excesiva después de comer, que persiste durante un período prolongado, puede indicar problemas en el proceso de digestión.
- Inapetencia: la pérdida de apetito o la falta de interés en la comida son síntomas comunes asociados con la gastritis. Esta falta de apetito puede deberse a la incomodidad o molestias gástricas.
- Adelgazamiento: en casos más graves o crónicos de gastritis, la pérdida de peso inexplicada puede ser un signo de alarma. Esto puede deberse a una disminución en la ingesta de alimentos debido a los síntomas gastrointestinales o a una absorción deficiente de nutrientes.
¿Cuál es la causa de la Gastritis?
Aquí te contaremos unas de las causas más comunes por las que sucede la gastritis:
- Infección por Helicobacter pylori: esta bacteria es una de las principales causas de gastritis y puede provocar úlceras gástricas si no se trata adecuadamente.
- Consumo excesivo de alcohol: el alcohol irrita y debilita la mucosa del estómago, haciéndola más vulnerable a la inflamación.
- Uso prolongado de antiinflamatorios no esteroides (AINEs): medicamentos como el ibuprofeno o la aspirina pueden dañar la mucosa gástrica si se usan en exceso.
- Estrés crónico: el estrés emocional y físico puede alterar la producción de ácido gástrico, lo que puede inflamar el estómago.
- Enfermedades autoinmunes: algunas condiciones, como la gastritis autoinmune, ocurren cuando el sistema inmunológico ataca las células del estómago.
- Dietas irritantes: comer alimentos muy picantes, ácidos o grasos puede irritar el revestimiento gástrico.
- Tabaquismo: fumar aumenta la producción de ácido gástrico y reduce la capacidad de la mucosa estomacal para protegerse.
Dolor asociado a la gastritis ¿Por qué ocurre?
Cuando la mucosa digestiva se inflama puede provocar diferentes tipos de dolores que pueden variar en intensidad y características:

- Dolor ardiente: este tipo de dolor se caracteriza por una sensación de quemazón en la parte superior del abdomen. La sensación de ardor puede ser similar a la que se experimenta con el reflujo ácido, y a menudo se exagera después de comer. Este dolor ardiente puede ser constante o aparecer en episodios y generalmente es más pronunciado después de ingerir alimentos picantes, ácidos o grasos, que irritan el revestimiento del estómago inflamado.
- Dolor sordo: este dolor se describe como una molestia constante y persistente, que no tiene la intensidad aguda de otros tipos de dolor, pero puede ser muy molesto y debilitante. Este puede ser intermitente, apareciendo y desapareciendo a lo largo del día, o puede ser continuo. A menudo se asocia con una inflamación crónica del revestimiento del estómago y puede subir de intensidad si tienes episodios de estrés, ansiedad y consumes algunos alimentos irritantes.
- Dolor agudo: en casos más graves de gastritis, especialmente cuando están presentes úlceras gástricas, el dolor puede ser agudo y punzante. Este tipo de dolor es intenso y puede aparecer en cualquier momento. La naturaleza punzante de este dolor se debe a que las úlceras presentes están irritadas, causando un dolor severo, que puede empeorar al consumir alimentos y bebidas como alcohol, cafeína y las comidas muy condimentadas.
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Factores que influyen en este tipo de dolor
El tipo de dolor que se experimenta cuando tienes gastritis puede depender de varios factores, incluyendo:
Consejos para evitar la gastritis
- Come despacio y mastica bien: esto ayuda a la digestión y reduce la carga sobre el estómago.
- Mantén una dieta balanceada: incluye alimentos ricos en fibra como frutas no ácidas, vegetales y granos enteros.
- Evita comidas muy calientes o muy frías: los extremos de temperatura pueden irritar el estómago.
- Evita saltarte comidas: comer a intervalos regulares ayuda a controlar la producción de ácido gástrico.
- Hidrátate adecuadamente: bebe suficiente agua durante el día, pero evita hacerlo justo antes de dormir.
- Practica técnicas de relajación: el yoga, la meditación o ejercicios de respiración pueden ayudar a reducir el estrés que afecta al estómago.
- Mantén un peso saludable: el exceso de peso puede aumentar la presión en el abdomen y provocar reflujo ácido, contribuyendo a la gastritis. Recuerda hacer ejercicio con regularidad.
- Consulta al médico regularmente: si tienes síntomas recurrentes, como dolor abdominal o náuseas, busca orientación médica antes de que el problema empeore.

- Presencia de úlceras: si en consulta se le ha diagnosticado úlceras gástricas, puede llegar a experimentar cambios bruscos entre un dolor sordo y un dolor agudo.
- Estilo de vida y dieta: hábitos como el consumo de alimentos irritantes, el tabaquismo, dejar de comer por tiempos prolongados y el estrés pueden agravar significativamente el tipo de síntomas y el dolor que se experimenta.
- Condiciones preexistentes: otras condiciones médicas, como el reflujo o las infecciones bacterianas, pueden influir en la naturaleza del dolor.
Reconocer estos síntomas de manera temprana es fundamental para buscar atención médica oportuna y recibir un diagnóstico preciso. Si experimentas alguno de estos síntomas de manera recurrente o persistente, es importante consultar a un profesional de salud para recibir evaluación y tratamiento adecuado.
¡No ignores las señales que tu cuerpo te está dando y toma medidas para cuidar tu salud visitando el Hospital Nacional hoy!